Friday, July 25, 2008

ESTACIÓN COGHLAN Y OTROS CUENTOS de Mempo Giardinelli


Llegué a la obra de Mempo por recomendación de un amigo crítico literario, cuando vio un relato mío (indudablemente sin comparación, para beber de ese estilo y aprender). Me encanta su narrativa que surgen de hechos comunes y silvestres, algunos, pero que se ve resaltada por la pluma, la prefesión de escritor ya dominada y que mansamente conduce cada idea, cada frase, cada oración y resultan historia estupendas como el que le da nombre a este libro de cuentos, además de El libro perdido de Borges, Desembarco en la memoria, kilómetro 11, Ocho hermanos, entre otros.



Estoy seguro que les gustará leerlo. !Adelante¡


Aquí algunos comentarios sobre este libro:


“Las obras de Mempo Giardinelli son variaciones sobre la condición humana, no en un sentido abstracto sino concreto. Crea el universo de sus obras valiéndose de una escritura que parece ser realista. Pero ese realismo engaña; es irrealizado con diferentes recursos. La importancia de su obra consiste en que ha sabido resumir, en sus ficciones, en personajes que son proyecciones de su experiencia individual, la experiencia colectiva de su tiempo”.
Karl Kohut
Universidad de Eichstatt, Alemania

“Lo sublime y lo grotesco son los términos dialécticos entre los cuales se distiende la metáfora de Giardinelli para definir su mundo narrativo. Revela a un escritor que domina el arte de la parodia. Arte duro, difícil, el de manejar la amargura con gracia, la desesperación cantando. Eso es la parodia: para –aideia. Giardinelli canta, reflexiona, luego, habla.”
FERNANDO ALEGRÍA
CALIFORNIA, USA

“Giardinelli es un gran jugador literario, un lúcido incontrolable y también proclive al erotismo. Todo con una prosa que arrebata y nos lleva a donde al escritor se le da la gana.”
IGNACIO TREJO FUENTES
Sábado de Unomásuno, México.

“En Giardinelli hay sexo y muerte, hielo y fuego, y todo encuadrado en una escritura concisa, precisa, afilada.”
Christian Kazandjian
L’Humanité/ Revolution, París

HASTA QUE ME ORINEN LOS PERROS de Fernando Ampuero


Una novela para leerla de un tirón y divertirse, pero también a tomar conciencia que podemos caer en esa trampa, que para algunos resulta difícil, por decir lo menos. Una historia como tantas de la vida diaria en esta Lima, donde hay que caminar con cuidado y con todos los sentidos despiertos. Más, si vamos en taxi, y peor, con unos traaaaaaaagos encima.
Recomiendo su lectura de un fin de semana.
PLG


Hay errores que un borracho nunca debe cometer. Como, por ejemplo, tomar un taxi cualquiera de la calle, pensando que llegará tranquilamente a su destino.
Eso lo sabe bien Alberto, un hombre de vida normal a quien las angustias de su mala situación económica involucran de pronto en el peculiar negocio de los borrachos, una de las tantas sorpresas que depara la ciudad de Lima. Alberto, junto con otros taxistas, obtiene ingresos suplementarios recogiendo pasajeros ebrios y somnolientos, y vendiéndolos luego en distintos huecos o antros de ladrones, donde los desvalijan. Tan lucrativas andanzas cambian su suerte, pero pronto tendrá que enfrentar a Rosa, su mujer, una policía motorizada, que avizora un futuro de zozobras y crecientes peligros.


Recreando una atmosfera opresiva de ciega brutalidad, Fernando Ampuero, con el humor ácido y el ritmo de su prosa rápida y seca, nos entrega nuevamente una historia apasionante y un lapidario retrato moral del Perú contemporáneo.


Hasta que me orinen los perros, como las novelas anteriores de Ampuero, Caramelo verde y Puta linda, vuelve al asunto de los difíciles avatares que demanda la supervivencia en el país y cincela una vez más una historia de amor y tragedia que completa lo que el autor llama “mi trilogía callejera de Lima”.

texto de contratapa del libro. Planeta 2008